¡Bienvenidos a la adolescencia!
La ESO es una etapa de muchos cambios para el niño, por muchos motivos. En esta época, a los adolescentes deja de hacerles tanta ilusión ir a clase y los amigos pasan a ganar más peso en sus vidas, dejando la familia en un (temporal) segundo plano.
Esto, naturalmente, se refleja en los estudios, creando situaciones muy distintas a las del alumno de Primaria. Así que, como consejo, no esperes que el adolescente tenga los mismos problemas que dos o tres años atrás. Tu hijo ya no es el mismo y debes adaptarte a una nueva versión de la misma persona.
¿Qué carencias suelen arrastrar los adolescentes de Secundaria?
Esta es una buena pregunta, porque querrás saber qué asignaturas puede llevar mal tu hijo, o, al menos, cuáles son las más probables. Y, más importante: ¿cuál es la solución?
Malas notas en general
Este es un fenómeno relativamente común. Seguro que has conocido a algún padre que se queje de que su hijo ha pasado de suspender dos o tres a no aprobar ninguna. Y tal vez seas tú ese padre. Los motivos son muy variados: nuevos amigos o nuevas actividades que desvían la atención del niño, mala gestión del tiempo, problemas psicológicos (¿has pensado en bullying?). Este problema requiere una acción integral, en el que tanto padres como profesores del centro y de la academia deben participar activamente, junto con el alumno.
Inglés (evidentemente)
El inglés se enseña mal, te dirá tu hijo. Depende de a quién le preguntes, te dará la razón o no. Desde Academia InSiTu, le damos la razón... a medias. Hasta 1º de ESO, los niños no tienen oportunidad para aprender inglés de verdad; lo único que han hecho es aprender el verbo to be y have got y algo de vocabulario que ya se les ha olvidado. Y luego, a partir de 2º, la dificultad aumenta muchísimo, dejando a los chavales sin una base en serios apuros. ¿La solución? Hay varias. Puedes combinar el repaso de Inglés con otras asignaturas escogiendo el Repaso académico habitual, siguiendo el ritmo y los contenidos del instituto; o puedes optar por construir una base duradera con la extraescolar Inglés Básico para chavales de ESO.
Matemáticas (evidentemente, de nuevo) y Ciencias
Las matemáticas se les hacen bola a los chavales desde Primaria. Eso lo sabías desde hace años. El problema es que, una vez llegan a 1º o 2º de la ESO, la dificultad de los contenidos aumenta drásticamente, pasando de simples operaciones combinadas a ecuaciones de segundo grado, funciones y trigonometría. Comprendemos que este salto puede ser muy grande para muchos chicos, por lo que te ofrecemos apoyo escolar para Matemáticas, aunque puedes combinarlo con cualquier otra asignatura.
Por otro lado, Física y Química (a partir de 2º ESO) y Tecnología tampoco se lo ponen fácil a los alumnos, debido a lo abstracto de muchos de los contenidos de estas asignaturas. Aprenderse las partes de la célula es fácil, porque es visual..., pero y ¿los átomos?, ¿las valencias?, ¿todas esas fórmulas de física? Precisamente es complicado porque no se puede ver y es difícil de imaginar.
Autonomía y hábitos de estudio
"Si me despisto, el niño no hace nada". Te suena la frase, ¿verdad? A muchos adultos nos gustaría que el chaval supiese organizarse por sí solo..., pero seguro que no aprendiste a conducir tú solo, ¿a que no? Porque es una habilidad que se aprende. Nadie nace enseñado. A hacer esquemas y resúmenes no aprendiste tú solo, sino que te acompañaron en el proceso (y si no, pues lo más probable es que nunca adquirieses esta habilidad). No le puedes pedir a tu hijo que aprenda a organizar su tiempo si nadie se sienta con él y le muestra cómo hacerlo. En InSiTu, le enseñamos cómo hacerlo, adaptando el método de estudio a la asignatura, porque Mates no se estudia igual que Lengua, ¿verdad?
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